LA ENERGIA

La energía

Tener acceso a la energía es elemental para todos los seres humanos y criaturas que habitan en la Tierra. Existen varias formas de energía como las que se originan de la electricidad, la mecánica y la química siendo asi la luz y el calor también fuentes importantes de energía.

La energía no puede ser creada ni destruida, sin embargo su transformación es posible, por ejemplo, cuando se convierte la energía solar a la energía química. Los orígenes de dicha energía se basan en la creación del universo (Teoría de la Gran Explosión) hace 15 billones años, lo cual además dio lugar a la creación de nuestro sistema solar, la Tierra y los demás planetas existentes.



La energía de los humanos y perros es en su mayoría es producto del sol!

El sol suele producir el tipo de energía que los seres humanos necesitamos para alimentamos. La fuerza de la energía solar que recibe nuestro planeta, equivale a unos 126 billones de caballos de fuerza diarios. Las plantas verdes absorben los rayos solares y gracias a la clorofila y son capaces de convertir dicha energía solar en energía química, por medio de un proceso llamado fotosíntesis. La energía química es almacenada en los nutrientes que posteriormente no la transfieren tanto a los humanos como a los animales en forma de proteínas, grasas o carbohidratos. En el casos específico de las plantas, los nutrientes son retenidos principalmente en forma de carbohidratos y en el caso de los seres humanos y animales son acumulados en forma de grasas, por ejemplo, las vacas se alimentan de la hierba que después se convierte en grasa.
En resumen, todo esto significa que tanto los seres humanos, como los animales absorben la energía proveniente de las plantas verdes.

Todas las funciones del cuerpo necesitan energía. Para posibilitar el movimiento de los músculos, los nervios, el crecimiento del pelo y la piel, el control de la temperatura del cuerpo y hasta la misma digestión, es esencial que el cuerpo se nutra de energía para separar los nutrientes alimenticios. Es por eso que, su perro debe recibir una cantidad adecuada de energía antes de que puedan satisfacerse otras necesidades nutritivas del organismo. En caso de que a su perro le faltara proteína y/o energía, el cuerpo del perro trataría de potenciar su capacidad física usando las proteínas alimenticias existentes y así tratar de subsanar la falta de las mismas.


Diferentes tipos de energía

Si discutimos el tema de la energía comparando el valor de los diferentes productos de alimentación para los perros, es importante tener en cuenta los tres siguientes conceptos:

La cantidad total de energía que contiene 1 ración de comida seca, se llama energía bruta. No obstante, la cantidad de proteína que queda disponible, no puede ser asimilada totalmente por el cuerpo del perro. Los restos de energía restante son absorbidos por las células de los tejidos del cuerpo y llamados energía transformable.Es dicha cantidad de energía la que comúnmente se encuentra indicada en los paquetes de comida.

Es importante mencionar que la cantidad de energía convertible es diferente para cada tipo de especie. En otras palabras, la energía convertible obtenida del pasto es significativamente mayor para los caballos; en comparación, por ejemplo,con los perros debido principalmente al tamaño del intestino del caballo, el cual es mucho más largo y adaptado para convertir el pasto en energía y nutrientes que el del perro. Debido a las peculiaridades de cada tipo de especie, los datos acerca del contenido nutritivo indicado en los envases de alimento, corresponden al animal para el cual la comida se encuentra específicamente orientada.


El equilibrio de energía

Conseguir un equilibrio de energía, solo es posible a través del alimento del perro. Es decir, que por medio del alimento es posible llegar a reponer la misma cantidad de energía gastada por el perro. Dicho balance es importante ya que en caso de exceso de energía puede causar problemas de obesidad en perros adultos, mientras que la insuficiencia de la misma puede provocar desnutrición o poco peso.


El consumo de energía de un perro puede ser dividido en tres partes

1. La energía que se gasta en reposo y que se utilizan para las funciones esenciales del cuerpo.
Aproximadamente entre 65% y 75% de la energía del perro se gastan en dichas funciones.

2. La energía usada durante la actividad muscular. Los perros activos utilizan cerca de un 30% de energía para realizar actividades físicas. Si el perro es muy activo (los perros de caza) la cantidad de energía gastada se incrementara marcadamente. Para mantener el equilibro de energía al efectuar actividades desgastantes, se recomienda una comida de alto contenido nutritivo.

3.Finalmente los perros requieren una alta cantidad de energía para poder digerir la comida, para dicha función normalmente se requiere 10% de la cantidad diaria.


¿Cómo se puede calcular la energía?

La energía química no cuenta con unidades de medida y por eso que no puede calcularse de forma directa a diferencia del peso (kilos) o de la distancia (kilómetros).

No obstante, se puede calcular la cantidad de calor que produce el cuerpo al utilizar la energía química, que contienen los nutrientes. La generación de calor se mide en unidades de calorías. Una caloría equivale a la cantidad de energía que sea necesaria para aumentar un grado la temperatura de un gramo de agua. Dado que un gramo es una unidad muy pequeña para poder calcular el valor de energía que se encuentra en cada nutriente, la energía puede ser calculada en kilocalorías (1 kilo equivale a 1000, i.e. 1 kilocaloría = 1000 calorías). Actualmente, es cada vez más común aplicar los kilos joules como modo de cálculo. 1 Kilo joule equivale a 4.18 kilocalorías. 1000 Kcal. = 4180 kJ:


La condición natural de los seres vivos es estar hambriento

En general, se dice que la condición natural de todos los seres vivos es tener hambre. Es decir existe un hambre eterna por la energía. ¿Qué es lo que determina el apetito de su perro? La respuesta reside en el cerebro o mejor dicho en el hipotálamo. Dicho centro de hambre detecta constantemente las cantidades de nutrientes, hormonas y proteínas en la sangre y si la suma es muy reducida, indicaciones serán enviadas al cerebro para difundir señales de hambre.

Además, el hipotálamo reacciona ante imágenes visuales, olores y sonidos. Por ejemplo, en el caso de los perros, son capaces de detectar los sonidos producidos al abrirse la puerta del frigorífico, al poner la comida seca en el palto o incluso con el siemple olor a comida. Todo esto llega a crear una sensación aguda de hambre.

La expansión del vientre es otro factor que controla el hambre. Es por eso que si el vientre se encuentra vacío, señales son enviadas al cerebro y así la sensación de hambre se intensifica. Opuestamente, si el vientre esta lleno, la sensación de hambre se apacigua.

Naturalmente, la comida es capaz de incrementar las sensaciones de hambre. Una clase de comida apetitosa puede causar una repentina sensación de apetito. Asimismo, el instante en el que se sirve la comida también resulta determinante para detectar sensaciones de hambre, dado que el sistema biológico del perro se encuntra acostumbrado a los momentos determinados, en los que se da la comida. Igualmente, el entorno del perro desempeña un papel importante ya que según investigaciones recientes, los perros comen más rápido y una mayor cantidad si se encuentran rodeados de otros perros que se pelean por la comida. Por otro lado, el consumo de energía se caracteriza por el número de ocasiones en las que se sirve la comida. Es decir, si el perro recibiera raciones pequeñas de una cantidad específica muy a menudo, entonces consumiría aproximadamente un 15% más de energía que le ayudaría a digerir la comida, en comparación de un perro que come una vez al día.

Es por eso que se hace la recomendación de proporcionar al perro pequeñas cantidades de alimento frecuentemente como modo de prevenir la obesidad en el mismo.


¿Cómo se calculan los requerimientos energéticos del perro?


Existen varios métodos para calcular las necesidades nutritivas diarias del perro, sin embargo, como punto de partida se pueden usar los valores extraídos de fórmulas matemáticas y en caso de notar que el peso del perro aumentara o disminuyera, la entrada de energía debe de ser ajustada.

Los factores principales que condicionan la necesidad diaria de energía son la edad y la actividad física y si la perra se encuentra preñada, entonces es aconsejable aumentar el consumo habitual de energía. Además, las perras que tienen muchos cachorros necesitan la misma cantidad de energía que un perro con una alta actividad. Por lo tanto, se recomienda normalmente una comida de alta nutrición. Los perros pequeños necesitan más energía por kilo de peso que los perros grandes, algo que se controla a través del tamaño de las raciones servidas. Asimismo, los cachorros requieren una dieta más completa de energía comparado con un perro adulto. Por esta razón, la existencia de varias comidas especializadas para cachorros que requieren de más proteínas y nutrientes para satisfacer sus necesidades. Además, la temperatura ambiental influye en el consumo enérgico de los seres vivo, es por so que en lugares o condiciones climáticas frías (unos grados bajo cero) entonces el perro tendría que comer más para mantener su temperatura de cuerpo. La tabla nombrada: “Lo esencial para cuidar a su perros”, puede ser empleada para calcular las necesidades nutritivas de su perro.

La producción de energía transformable en la comida del perro es llevada a cabo por medio de la disminución de la cantidad total de energía del producto con la energía con es gastada vía orina o excremento.

Existen dos métodos que suelen ser empleados por los productores de comida para calcular el valor de la enegía de sus productos. El primer método se basa en medidas reales, resultado de pruebas efectuadas en las que se sirvieron raciones de comida con una suma determinado de energía y después se calculo la energía de orina y excremento. Por medio de este procedimiento es posible conseguir el valor de la energía convertible. Sin embargo, las desventajas de éste, se basan en que puede resultar laborioso y caro, debido a que es necesario mantener cautivos a los perros en jaulas durante la fase de cálculo.

El método alternativo y más común se basa en cálculos matemáticos que parten del análisis del producto y de su composición de proteína, grasa y carbohidratos. Se multiplican dichos elementos por una cifra que se calcula de la digestión prevista de la materia prima en el producto.


Un posible cálculo sería:

La asociación de agricultura en Suecia (Jordbruksverket – JV), el principal supervisor de los fabricantes de comida para animales, calcula la cifra de energía y después, se ponen estas cifras en los envases. El método es proporcionar una cifra aproximada de la energía convertible. Si la comida del perro fuera de inferior calidad y constara de materia prima que fuera difícil de digerir, entonces la cifra de energía seria demasiada elevada. Por otro lado, si el producto es de calidad superior y con materia prima que sea fácil de digerir, entonces la cifra de energía dada seria demasiada baja. Esto es el caso de Revelj Original. En los cálculos hechos, con base en las pruebas previamente comentadas se encontró una resultado con cifras más elevada frente al obtenido de las investigaciones de la asociación de agricultura de Suecia.

La ventaja del método de la asociación de agricultura es que puede ser aplicado siempre en la misma manera y esto permite que se pueda comparar de forma estándar el nivel de energía de los diferentes productos.

En la parte final de este documento se encuentra un ejemplo de un método empleado para calcular las necesidades nutritivas de su perro. UH significa las necesidades alimentarías de su perro e informa cuánta nutrición debe recibir diariamente un perro adulto con vida normal para mantener su nivel de peso. El aditivo nutritivo es esencial para el perro además de sus necesidades básicas. Con base en la tabla, se puede concluir lo siguiente: Los perros muy activos necesitan entre 2 o 3 veces más nutrición que un perro con vida normal.